julia moreno
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Llegué con mi informe médico que prescribía una fórmula magistral con producto "x" al 5 %, con su correspondiente receta electrónica, me avisan de que ya lo han recibido, y al recogerlo me encuentro con que tiene una fecha de caducidad de dos meses, que el tamaño del producto es aproximadamente para un año y que además el porcentaje elaborado es al 3%. Reclamo que el producto no es correcto, que no va a tener eficacia, que no es lo que figura en el informe y que además lo voy a tener que tirar entero y solicito la devolución del mismo y su reembolso económico. Me contestan que ellos no tienen la culpa, que reclame a mi médico y que ellos se han limitado a encargar lo que figura en la receta electrónica, (a la que ningún usuario tenemos acceso...)Y yo me pregunto: y entonces para qué me piden el informe médico, mi nombre, dirección, DNI, teléfono, si no hacen ninguna comprobación?; para qué tanta cualificación si no comprueban nada?; para qué tantas restricciones y controles si me están dando lo que no es?...¿Cuál es entonces la labor de las farmacias? Y si es meramente la de vender, por qué no se hace en los grandes supermercados y elegir así a los que mejor precio, calidad y amabilidad nos ofrecen? Claro, qué tonta, el negocio farmacéutico mueve mucho dinero, cómo van a renunciar ellos a sus altos porcentajes de beneficio...
Pues 80 € me ha costado el "producto", sí 80€ y el día 19/02/2023 lo tengo que tirar a la basura...Menos de dos meses porque hoy estamos a 22 de diciembre. Si dividimos 80€ entre 12 meses y el resultado lo multiplicamos por 2 meses que es lo que voy a poder utilizarlo, me da una cantidad aproximada de 13€. La cantidad de producto que voy a utilizar es equivalente a 13€ . Esto quiere decir que voy a tirar a la basura 67€. ¿Cómo se quedan al oír esto? ¿A alguno de ustedes les sobran 67€?. A mí, no! Evidentemente dan ganas de llorar. Solicité el formulario para realizar mi reclamación, y todavía la técnico de farmacia me decía cómo tenía que redactar "mi reclamación" , y el Licenciado presente y supongo que propietario, escondido tras las estanterías sin dar la cara, escuchando lo que allí estaba sucediendo y como el que oye llover. Pues espero que tengan unas felices fiestas porque a mí ya me han dado las Navidades, Porque quien no se frustra y se enfada ante la indefensión y la humillación que se siente cuando abusan y pisotean nuestros derechos como consumidores?.
Mi consejo: no vayan a este establecimiento y si lo hacen supervisen todo, porque como han podido ver en mi relato, no son buenos profesionales.